
Hasta hace unas pocas semanas todavía nos estábamos alegrando de que la ultraderecha alemana no tuviera una fuerza comparable a otras tristemente famosas ultraderechas del mundo, como el Frente Nacional de Marine Le Pen en Francia, el PVV de Geert Wilders en Holanda, o el sector republicano que votó por Trump en los EE.UU.
Bueno, nos alegrábamos antes de tiempo. Con las elecciones a pocos días, la AfD (Alternativa para Alemania) ha lanzado una arremetida que, si les creemos a las encuestas, le ha reportado no pocos repuntes en el número de potenciales votos.

Los activistas de la AfD comenzaron por atacar directamente a Merkel en los lugares públicos a los que ella iba a pronunciar los discursos de su campaña, haciendo ruido y rechiflando para no dejarla hablar. Al mismo tiempo han lanzado una ofensiva ideológica, “Alemania primero”, para recordarles a todos los indecisos que todavía están a tiempo de votar por una agenda nacionalista y no por la política de puertas abiertas de Merkel y los otros partidos. El objetivo es canalizar a su favor los sentimientos anti-refugiados que indudablemente tiene una parte de la población alemana. Y parece que lo están logrando.
Hace una semana la AfD estaba abajo en las encuestas, y ahora ya los ubican en la tercera posición, por encima de los Verdes y de los Liberales, y como siga así la cosa, en los pocos días que faltan para la votación…, ¿se podrían subir a la segunda posición? No sería muy raro, después de todo. Tanto Francia como los Países Bajos vieron caer estrepitosamente este año a sus respectivos partidos socialdemócratas y ascender a los de extrema derecha. En Alemania podría suceder algo parecido. Ojalá que no. Aunque –pero ya esto se sabe desde hace tiempo – es seguro que la AfD entrará por primera vez a ocupar puestos en el Parlamento. La pregunta es, ¿cuántos puestos?
A pocos días, pocas horas, de las elecciones, la AfD ha re-energizado su campaña haciendo hincapié en que ellos representan una verdadera alternativa a los partidos tradicionales. Menos mal que las elecciones son ya este domingo, 24 de septiembre, porque con un poco más de tiempo a su favor, y al paso que va su ofensiva extremista, y si les creemos a las sondeos de opinión, no hay quien los frene en su flagrante ascenso.