No nos estamos tomando en serio el calentamiento global
Los planes y proyectos de las conferencias sobre el cambio climático de Naciones Unidas avanzan como las procesiones de antes, dos pasos adelante y uno atrás. Se logran acuerdos, se firman tratados, las naciones hacen promesas, la delegaciones de los países, los activistas de las ONG, todos se se toman fotos sonrientes, vamos por el buen camino, dicen. El mundo se alegra. Dos pasos adelante. Pero al final no cumplen, o cumplen a medias y a regañadientes. Un paso atrás.
COP16, una conferencia para intentar salvar lo que aún no se ha perdido
— nutrinews.com —
Esta podría ser una imagen neutral de un extenso cultivo de soja en Suramérica. Si nos acercamos un poco más a la información que acompaña esta foto nos enteraremos de que la superficie sembrada de soja en Suramérica sobrepasa los 66 millones de hectáreas, y que cada año esta superficie se incrementa en un cinco por ciento. Si vamos aún un poco más cerca sabremos que no hace mucho tiempo, todo ese terreno estaba cubierto de una enorme variedad de bosques, de rica vegetación, árboles, lianas, musgos, helechos, hongos, numerosas especies de animales, insectos. Era lo que se conoce como una selva tropical, una enorme masa vegetal rica en biodiversidad, retenedora y generadora de agua dulce.
Bueno, todo eso desapareció cuando talaron los árboles, prendieron fuego y arrasaron la tierra para prepararla para cultivos como el de esta imagen. Un monocultivo. Una única planta, soja, en 66 millones de hectáreas. No hay peor atentado a biodiversidad que un monocultivo.
Entre 1991 y 2003, el escultor británico Antony Gormley creó cinco enormes instalaciones llamadas Fields (Campos) compuestas de miles y miles de figuritas de arcilla como las de esta imagen, puestas en cinco diferentes espacios. En estos días se puede ver en Voorlinden, un precioso museo de arte contemporáneo en Holanda, uno de estos campos, el que se titula, Amazonian Field (1992). La historia detrás de este curioso ‘campo amazónico’ bien vale la pena ser contada.