La única manera de solucionar verdaderamente el problema de la migración es creando las condiciones en los países de origen para que la gente no tenga necesidad de emigrar.
De nada sirve que hoy los países receptores de población migrante pongan toda clase de obstáculos, que dificulten los trámites hasta hacer prácticamente imposible el ingreso, o que levanten muros y barreras de contención de varios metros de altura en las fronteras. Mientras haya gente viviendo mal, sin futuro para ellos y sus hijos, muchos estarán dispuestos a correr cualquier riesgo para llegar a un país próspero que les ofrezca un futuro. Continuar leyendo «Migración – Huyendo de la pobreza y el conflicto»
