En vez de estar reflexionando y siendo objeto de cuestionamientos por su desafortunado papel en la historia mundial de la pasada década, George W. Bush disfruta de un ocioso retiro reinventándose como artista.
Ahora que ya no tiene la oportunidad de tirar bombas en Afganistán, de comenzar una nueva guerra en algún lugar del mundo, de pasarse por la faja las decisiones de la comunidad internacional en Naciones Unidas, de aparecer en la televisión en tanto que presidente de los EE.UU. diciendo barbaridades (bushismos), etc., etc., George W. Bush está camino a conquistar otro prominente puesto en la historia de la humanidad, ahora en el ámbito de las bellas artes.
Al parecer estas fueron las obras que lo lanzaron al mundo artístico:
¡Qué lindos perritos! ¿No es cierto? Según su profesora de pintura, el señor 43 (con este número firma sus cuadros dado que fue el que le correspondió en la lista presidencial) es un talento natural. Ha pintado más de 50 perros. Su carrera ha sido meteórica. A los pocos meses ya había superado la ‘fase perruna’ para dedicarse al paisaje.
Pero 43 ha seguido avanzando en su carrera artística como un meteorito y por estos días se encuentra ya instalado en otra nueva fase que ha dado bastante qué hablar a la crítica especializada. El New York Times ha comparado sus obras con… Bonnard. ¡En serio! Bueno, algo hay. Miren esto y comparen:
Cuadro de 43
Cuadro de Bonnard
¡Wow, este hombre era un genio dormido! De un momento a otro se ha transformado de Jeff Koons en Jasper Johns. A ver qué sorpresa nos reserva el mes próximo el presidente-artista 43, pues al paso que va…
En las tres obras más recientes, 43 aparece desnudo bañandose. [vale la pena abrir este link] Según un crítico, el desacreditado George W. Bush estaría intentando limpiarse las culpas de los errores cometidos en su vida. Sin duda lo necesita.
Otro comentarista le encuentra un parecido a la carita de Bush en el espejo del baño
con el Cristo de Borja, ¿se acuerdan? ese que restauró el año pasado una anciana en un pueblo de España.
Si. El del baño debe ser un Bush restaurado.
Yo no sé a qué se dedican ahora los viejos compinches de Bush, los señores Cheney, Rumsfeld y toda la pandilla de asesores de su Gobierno, pero me pregunto si por las noches no tienen pesadillas por la culpa que les corresponde por haber empujado al mundo a semejante catástrofe como fue la guerra de Irak y la cadena de consecuencias que esto trajo, entre tantas otras torpezas.
Entonces se me ocurre que en su próxima fase, 43 estará haciendo cosas parecias a ésta:
Luego de lo cual quedará consagrado como un gran maestro.